Las arenas de la Magdalena

Como respuesta a la petición de pareceres sobre su proyecto para estabilizar las arenas de las playas de Los Peligros y la Magdalena, les contesto y envío una propuesta:

Conozco de primera mano la evolución de la playa ya que nací y vivo encima de ella, en los chalets de Yllera, desde hace cincuenta y ocho años.
Como podrán observar en las fotos 1 y 2, la primera de 1880 y la segunda de 1900, ya existía arena en la playa.
En la foto 3, de 1905, se ha dibujado la línea del muro de los chalets de Yllera y del campo de polo.
En las fotos 4, 5 y 6, en las que se puede ver la construcción de las casas de Yllera, de fecha 28 de abril de 1947, se observa perfectamente el estado de la playa con los muros antes citados.
Con anterioridad al año 1969 se construye por la Junta de Obras del Puerto el espigón situado en la playa de Biquini llamado "muro para aportación de arenas a la playa de la Magdalena". De resultas de esta obra se vacía la arena de la playa, justo el efecto contrario para lo que se construyó el muro.
Esta desaparición de arena originó el descalze de las cimentaciones de los muros, tanto el de Yllera como el del Tenis y el del campo de polo, por lo que el representante de la Intendencia de la Casa Real Española, don Fernando María de Pereda, el presidente del Tenis, don Antonio Zúñiga, y mi padre, don Alfonso Yllera, escriben a la Junta del Puerto de Santander con fecha del 13 de febrero de 1969 advirtiendo de la responsabilidad de la mencionada Junta en el descalze de las cimentaciones antes apuntadas, documento que reproduzco DOCUMENTO 1.
La Junta del Puerto contesta con escrito de fecha del 21 de febrero de 1969, que reproduzco como DOCUMENTO 2, comprometiéndose a "ejecutar las obras precisas para detener la desaparición de las arenas", y "llevar a efecto las reparaciones necesarias en la propiedades lindantes con la costa y playa citadas". (Los muros de Yllera, Tenis y Palacio antes citados).
La Junta refuerza la cimentación con un pequeño muro la esquina del muro de los Sres. Yllera, rellena de arena la playa por medio de la draga "Virgen de la Peña", y abre en el muro de la playa de Biquini cinco o seis ojos, hoy existentes, para que la arena situada al este del muro pase por estos hacia la playa de la Magdalena.
En el año 1972, las personas antes mencionadas vuelven a escribir a la Junta del Puerto diciendo que la erosión continúa. (Reproduzco escrito como DOCUMENTO 3, y fotos con números del 7 al 12), pidiendo que "se efectúen serios y completos estudiso sobre este fenómeno", y sugiriendo que se solucionaría el problema haciendo desaparecer buena parte del muro construido en la playa de Bikini, cosa que nunca se hizo.
A partir de esta fecha, según mi memoria, y hasta el año de remodelación de la rampa de acceso a la playa de la Magdalena desde la calle Horadada, que calculo que sucedió durante el año 2001, se efectúan dos o tres rellenos de arena importantes. Esto es, nótese, en treinta años.
La remodelación del acceso a la playa desde la calle Horadada, aproximadamente del año 2001, que se adentra mucho más en la playa que la anteriormente existente, trae nuevos problemas. Al año de su ejecución baja el nivel de arena haciendo impracticable el acceso por esta de las máquinas, y dificultando el de los peatones.
Como la rampa sólo tiene acceso por el oeste, los usuarios de la parte este de la playa no pueden salir de ella, ya que, al haber descendido la cota de arena, con marea alta cubre hasta la cintura.
Para solucionar este problema de inaccesibilidad por la rampa de acceso nueva, todos los años y cada uno de ellos, desde que se ejecutó la mencionada obra, se rellena la zona con arena de Los Peligros, que sobra, y de la playa de Biquini, en donde también sobra, vertiéndola a unos 50 metros al este y al oeste del embarcadero del balneario.
A la vista de todo esto, por simple deduccion de causa y efecto, se descarna la playa a raíz de la obra del mencionado acceso, en unos 100 metros.
La propuesta que se nos ocurre es, simplemente, modificar la rampa de acceso a la playa retrayéndola hacia el aparcamiento, y derribar el principio del embarcadero unos 10 metros para que no exista el cuello de botella existente hoy entre ésta y el embarcadero, que hace que las mareas y el viento sur aceleren su velocidad erosionando esta zona.

Otros temas
Desde hace tres o cuatro años se retiran por los tractores de la limpieza, desde septiembre hasta abril, una media de tres o cuatro toneladas de algas al día, siendo éstas un elemento natural de fijación de la arena. Esto hace unas mil toneladas al año de algas retiradas.
El muro de la playa de Biquini ya ha originado que cuatro chavales se hayan quedado parapléjicos debido a su existencia y mal diseño, ya que sus paredes no son verticales ni lisas.
Con respecto al espigón propuesto en la zona del promontorio de San Martín, al oeste de Los Peligros, no vemos la razón de proyectar un espigón de aporte de arenas donde ésta sobra.

Sobre el estudio para "estabilización del sistema de playas Magdalena-Peligros", realizado por el Departamento de Oceanografía y Costas de la Escuela de Caminos.

Hemos consultado el informe en la página http://www.emisarios.unican.es/playa/, ya que ni en Costas ni en la Escuela de Caminos hemos conseguido una copia, y resulta que en el PDF faltan al menos los capítulos 1 y 3 del estudio.

En lo que hemos leído notamos varios errores:
1/ Se dice que con el muro de Biquini se generó una playa, y como hemos explicado con documentos y fotos, sucedió lo contrario, se vació. La playa la originó la draga "Virgen de la Peña" por la actuación de la antigua Junta del Puerto.
2/ Como apoyo a mis argumentos sobre las consecuencias que tuvo la remodelación del acceso a la playa desde la calle Horadada, podemos ver las fotos del estudio 2.32 y 2.39, antes de su ejecución, y la 2.33, después. Se observa que, a causa de esta obra, comienza a desaparecer la arena que antes existía.
3/ El mismo estudio, en su capítulo 4, admite la complejidad del asunto y la imposibilidad de analizar el asunto en toda su entidad. Por ejemplo, nunca se menciona la erosión producida por el viento sur.
4/ En el punto 4.3.1 del estudio se explica que se han tomado datos en la playa sólo tres días, dos en julio y uno en agosto de 2006, diciendo el mismo estudio que hay que ser cautos con los resultados debido a esto, ya que con esos tres días de labor de campo es imposible que se pueda predecir un futuro de cincuenta años.
5/ También se puede observar que el estudio no considera que, debido a los periódicos rellenos, la continuidad del crecimiento o merma de la arena es brutamente alterado, originándose grandes saltos en su evolución.

Todo esto hace pensar que tal estudio es insuficiente para tomar la decisión de ejecutar uno o varios espigones, y que no sabemos a ciencia cierta si esta actuación va a ocasionar, por ejemplo, que se ciegue la canal a la altura de la isla de la Horadada. En un sistema tan complejo no se habla de las posibles consecuencias en el resto del sistema de la bahía.
Por todo esto, desde mi humilde opinión y reconociendo la buena labor realizada por el Departamento de Oceanografía y Costas de la Universidad, y la buena intención de los organismos que han impulsado el estudio, les animo a seguir tomando datos y ampliar ese estudio, hasta que no quepan dudas del resultado de una actuación tan arriesgada y de unas consecuencias hoy imprevisibles para el sistema de la bahía de Santander y su puerto.
Contento de facilitarles la información que en mis manos tengo, y la que mi cabeza recuerda, atentamente.

Javier Yllera Palazuelo, arquitecto.

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FOTOS Y DOCUMENTOS

FOTOS ANEXAS AL DOCUMENTO 1

(Para ampliar las fotos, pinche sobre ellas)